Has estado soñando con esa nueva cocina y comedor desde que tienes uso de razón, y ahora ha llegado el momento de poner tus planes en marcha. ¿Pero realmente tienes presupuesto para costear las obras? Aquí hay algunas cosas en las que pensar antes de dar el salto.
Calcula tu presupuesto
Antes de considerar pedir dinero prestado, primero debes calcular cuánto costará la renovación. Contacta Ask an Architect para obtener tu guía completa de cómo calcular el coste de una renovación.
Antes de finalizar sus planes, puede solicitar que un inspector de edificios te ayude a identificar cualquier trabajo estructural que pueda ser necesario. Un trabajo importante podría aumentar significativamente tu presupuesto, por lo que puede valer la pena hablar directamente con un profesional para obtener una comprensión más personalizada de cuánto estás dispuesto a pagar. Los arquitectos y maestros de obras suelen estar contentos proporcionando una cotización, así que piensa en obtener más de una cotización para darte una idea de la gama.
Además, añade un porcentaje para imprevistos: la mayoría de expertos recomiendan añadir otro 10% a 20% al presupuesto total para cubrir los inevitables retrasos y complicaciones que surgen durante todo el proceso de renovación.
Una vez que sepas cuáles pueden ser los costos, puedes comenzar a pensar en cómo recaudar el efectivo. Por supuesto, en un mundo ideal habrías ahorrado al menos parte del importe de antemano, pero las renovaciones pueden ascender a decenas o incluso cientos de miles, por lo que la mayoría de las personas necesitarán pedir prestado algo de dinero.
Desbloquea tu patrimonio
Si has estado en tu casa por un tiempo, es probable que tengas un valor líquido considerable, tanto como resultado del pago de tu préstamo hipotecario inicial como del aumento del valor de la propiedad.
El valor líquido es la cantidad de vivienda que posees; es decir, el valor de tu propiedad, menos el monto pendiente del préstamo. Por ejemplo, si tu propiedad está valorada en $500 000 y debes $300 000 por su préstamo, tu capital es de $200 000 ($500 000 – $300 000 = $200 000).
Siempre que puedas cumplir con los pagos y es probable que las renovaciones agreguen valor a su propiedad, la mayoría de los prestamistas deberían estar dispuestos a prestarte un porcentaje de tu capital para renovaciones de la vivienda. Dependiendo de tu situación, se puede acceder a este capital mediante un nuevo giro, aumentando tu préstamo existente o refinanciando tu préstamo por completo. Un mortgage broker podrá asesorarte sobre la mejor opción para ti.
Préstamos para la construcción
La mayoría de los proveedores de préstamos hipotecarios ofrecen un producto llamado préstamo de construcción, que actúa como una línea de crédito a la que puedes recurrir cuando vencen los costos de renovación. La ventaja de estos es que no estás pagando el valor total del préstamo de una sola vez, sino solo el saldo progresivo del préstamo, que cambiará con el tiempo. Eso significa que puedes comenzar a liquidar la primera factura antes de que lleguen las siguientes, lo que te permitirá ahorrar dinero en general.
Tu Broker puede ayudarte a verificar con tu proveedor de préstamos hipotecarios si el préstamo es de "sólo intereses" durante un período inicial. Si es así, esto también ayudará a mantener bajos los costos durante el período crucial de construcción. Si el proveedor no tiene un préstamo de construcción específico, es posible que te permitan tener una línea de crédito general, que funciona de manera similar. Una vez finalizadas las renovaciones, el préstamo o la línea de crédito pueden incluso incorporarse a tu préstamo hipotecario.
Préstamos personales
Especialmente cuando la renovación es pequeña (tal vez sólo desees actualizar tu cocina sin necesidad de obras), podrías considerar un préstamo personal. Como los préstamos personales generalmente no están garantizados por tu propiedad, las tasas de interés suelen ser más altas. Sin embargo, como el plazo del préstamo es mucho más corto, deberías pagar menos intereses con el tiempo.
Cada opción tiene ventajas, por lo que vale la pena dedicar un tiempo a considerarlas detenidamente. Recuerda que siempre podemos ayudarte con cualquier duda que tengas.
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